jueves, 1 de julio de 2010

La dicha de Mayo y la tristeza de Junio

Han pasado tantos días que he querido escribir y se me han quedado las muchas líneas entre las calles que caminaba y los instantes que yo le hablaba.
No sé en que momento se terminó la noche y comenzó el día, o cuando el plácido día se había trasformado en noche. Mayo fue un regalo precioso, que se detuvo en los días que fueron tan cortos pero al mismo tiempo han sido inmensos, dándole a mi espíritu la felicidad de volver a sentir tan cerca esa emoción de verte nuevamente.
Y sin embargo esta vez me he quedado pensando, tanto así que he aplazado mis sueños, y mis pensamientos incluso hasta en no se cuanto tiempo más. Pero aqui estoy tratando de darle un respiro a todo el conglomerado en mi cabeza y lo que me ha ocurrido, lo poco que puedo entender y lo mucho que hacen los días dañinos que pasan sin que pase nada.
Sin embargo volveré, a mis letras y a mis palabras que son recursos que me alivian el alma.
Y tambíen algo divertido debo tener para obsequiar a este espacio virtual, sólo que pronto un tiempo más ha de tomar.
Junio se acabó, y no hay nada más que hacer para hacerlo volver, por más que me esfuerce por jalarlo y mantenerlo cerca de mí y asi no alejarme de Mayo, ya se fue, y no va volver.
Junio, no te voy a extrañar, finalmente fuiste tú quien me alejó de mi bello Mayo, y espero que ahora que ya no es Junio, todo sea mejor y lo de Junio triste siga en él.

1 comentario:

Hola, gracias por dejar tu coment: Jotita:D